jueves, 17 de diciembre de 2009

LUCASTAÑEDA: Se quedará mudo ante esto?


Ayer salio publicado en el diario Peru 21 un informe sobre una supuesta estafa que se cocino desde la Municipalidad de Lima y para los que no la pararon bien, hoy Cesar Hildebrant la puso mas claro que el agua y aqui recojo la carnecita para que analizen y comenten:

la Paso 1): No le pagan ciertos servicios a Relima (la empresa de limpieza).

Paso 2): Relima se va a un arbitraje que termina ganando. Reclama 47 millones de soles.

Paso 3): La Banda del Mudo acepta pagar 41 millones (36 de deuda y 5 de intereses), pero en diez años. Relima aparenta aceptar.

Paso 4): Relima le vende la deuda (es decir, su acreencia) a una empresa que “alguien” crea sólo para ese propósito. Se la vende con un 65 por ciento de descuento (¡ganga!), o sea que Relima recibe 14 millones y seiscientos mil soles de un porrazo y ya no los 41 millones en diez años. Esa empresa que “alguien” crea sólo para comprarle a Relima su deuda con el Municipio se llamó “Comunicore”.

Paso 5): En un giro sorprendente, extraordinario y malabarístico, el municipio de Lima “decide”, dos semanas después de que “Comunicore” comprara la deuda de Relima, que ya no pagará a plazos nada y que pagará al contado todo. Sí, como usted lo lee, amable lector: un 31 de diciembre los muy afortunados muchachos de “Comunicore” se enteran de que el municipio de Castañeda Lossio les va a pagar –y les pagó- los 36 millones de soles originales ¡y al contado!

Paso 6): el municipio de Castañeda procede a pagarle a “Comunicore” 36 millones de soles de un solo cocacho y en un solo cheque de gerencia. “Comunicore” obtiene así, en dos semanas, un poquito menos que 22 millones de soles de utilidad. ¿Y quién dice que en el Perú es difícil prosperar?

Paso 7): “Comunicore” se liquida. Total, después de ganar casi 22 millones de soles en dos semanas, ¿para qué seguir existiendo?

¿Y la Contraloría? Bueno, investigando a Forsur y a remotos municipios provinciales. O sea que el contralor Khoury ya entendió el mensaje y lo de Alí Babá-Kurí podría abrirse a nuevos socios.

¿Y Castañeda? Más discreto que nunca, regando concreto y hormigón y elevando como con levadura los presupuestos originales de todo lo que edifica. Porque, como usted sabe, “el Perú construye”.